Como alguien apasionado por la ilustración y decidido a formarme como ilustrador, he investigado a fondo las diferentes formas de lograr este objetivo en España. Aquí te voy a compartir todo lo que he descubierto para poder especializarme en mi pasión.
Si lo que buscamos en una educación formal, lo primero que la gente suele buscar son los estudios universitarios. Hay dos tipos de grado en los que puedes especializarte para ser ilustrador:
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Grado en Bellas Artes:
Universidades como la Complutense de Madrid y la Universidad de Barcelona ofrecen programas que abarcan desde el dibujo hasta la escultura. Estos programas proporcionan una base sólida en técnicas artísticas y fomentan una comprensión profunda de las artes visuales.
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Grado en Diseño Gráfico:
Enfocado en habilidades digitales y diseño contemporáneo, programas como el de la Universidad Politécnica de Valencia son ideales para estudiar la ilustración moderna. Estos grados enseñan el uso de herramientas digitales que son vitales en la industria actual.
Dependiendo de si quieres enfocarte en las artes tradicionales o en las técnicas más avanzadas en tecnología y enfocarte más a publicidad y videojuegos, podemos optar por el primero o por el segundo.
También están los ciclos formativos de grado superior en ilustración.
Para una formación más específica y directa en ilustración, los ciclos formativos en escuelas como ESDIR en La Rioja o la Escuela de Arte 10 en Madrid son opciones excelentes. Estos programas de dos años se centran en técnicas de ilustración, tanto tradicionales como digitales, y están diseñados para quienes buscan una entrada más rápida en el campo profesional.
Por supuesto, también existen Masters y cursos especializados con los que podemos formarnos de manera alternativa:
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Master en Ilustración:
Programas en el Instituto Europeo di Design (IED) y la Escuela Superior de Dibujo Profesional (ESDIP) permiten una especialización avanzada y la oportunidad de desarrollar proyectos personales a un alto nivel.
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Cursos en línea:
Plataformas como Domestika y Crehana ofrecen cursos para profundizar en áreas específicas como ilustración digital, cómic, y más. Estos cursos son perfectos para continuar aprendiendo y especializándome en temas de mi interés. A mí me han venido de perlas.
Desarrollo de Habilidades
Además de la educación formal, tienes muchísimas opciones para aprender por tu cuenta. Hay muchos tutoriales gratuitos, pero si no te van, puedes hacer como muchos hacen, prueba, practica y dibuja el mundo. Para especializarte en estos tiempos vas a tener que practicar tanto técnicas tradicionales como técnicas digitales:
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Técnicas tradicionales:
- Dibujo Anatómico y Perspectiva: Practicar estos aspectos mejora la precisión y expresividad de mis ilustraciones.
- Exploración de Medios: Probar con acuarela, óleo, tinta, y otros materiales enriquece mi repertorio y me brinda flexibilidad en mi estilo.
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Habilidades digitales:
- Software: Dominar programas como Adobe Illustrator y Photoshop, así como Procreate en el iPad, es esencial. Utilizar una tablet gráfica, como una Wacom o Huion, facilita la creación de arte digital con mayor precisión. Estas herramientas te van a dar mucha flexibilidad a la hora de borrar trazos erróneos. Equivocarse con esto no da tanto miedo ya que no puede estropear tu dibujo.
- Autoaprendizaje: Internet ofrece numerosos recursos para aprender de manera autónoma, desde tutoriales en YouTube hasta cursos en línea. Esto me permite explorar nuevas técnicas y mejorar continuamente a mi propio ritmo.
Creación de un Portafolio
Un portafolio sólido es vital para mostrar mi trabajo a posibles clientes y empleadores. Es tu carta de presentación, así que elije lo mejor. Aquí te cuento como puedes hacerlo:
Variedad y Contexto:
-Diversidad de estilos y técnicas: Es importante que el portafolio refleje nuestra versatilidad como ilustrador, mostrando una variedad de estilos y técnicas.
-Proyectos reales: Incluir ilustraciones en contexto, como libros o revistas ilustradas, ayuda a mostrar cómo nuestras ilustraciones se integran en proyectos concretos.
Presentación en línea:
-Plataformas profesionales: Usar sitios como Behance, ArtStation, o Dribbble para presentar nuestro trabajo. Además, tener nuestro propio sitio web nos permite controlar cómo se presenta nuestro portafolio y ofrecer una visión más completa de nuestra trayectoria artística.
Redes de contacto y experiencia
Construir una red de contactos es crucial para poder ser un ilustrador conocido:
-Redes Sociales:
Plataformas como Instagram, Twitter y LinkedIn permiten compartir nuestro trabajo, conectar con otros ilustradores y llegar a potenciales clientes. Estas plataformas son herramientas poderosas para construir una presencia en la comunidad artística.
-Participación en eventos:
Participar en certámenes como el Premio Nacional de Ilustración y eventos editoriales es una excelente manera de ganar visibilidad y experiencia. También, trabajar en prácticas en empresas de diseño o editoriales proporciona experiencia del mundo real y oportunidades de colaboración con otros profesionales.
Mantenimiento del portafolio y formación continúa
La ilustración es un campo en constante evolución, por ello, es un aprendizaje para toda la vida.
Por tanto, es esencial mantener nuestro portafolio actualizado con nuestros mejores trabajos y ajustado a lo que busca el mercado. Esto muestra nuestro desarrollo continuo y adaptación a nuevas tendencias.
También, participar en cursos avanzados y estar involucrado en comunidades y foros nos ayuda a mantenernos a la vanguardia de nuevas herramientas y métodos, asegurándonos que siempre evolucionemos como artistas.
Del aprendizaje del manejo de técnicas y materiales
En Artespray, tienda de materiales de bellas artes, consigo cualquier tipo de material con el que me apetezca practicar ya que tienen todo lo que pueda necesitar un ilustrador. Lo último que pillé fue esta silicona líquida para moldes y conseguí aprender mucho a base de prueba-error. Solo necesitas aprender a manejar una variedad de técnicas para mejorar y cuadrar tu estilo. Para ello manejar los diferentes materiales es fundamental. Si practicas con todo tendrás sin duda todas estas ventajas:
Exploración y versatilidad:
Cada medio, como acuarela, óleo, acrílico, y tinta, ofrece características únicas que enriquecen nuestro estilo y capacidad para adaptarnos a diferentes proyectos. Esta versatilidad nos permite manejar diferentes demandas del mercado y ampliar nuestras oportunidades profesionales.
Desarrollo del estilo personal:
Probar diferentes técnicas nos ayuda a descubrir qué materiales se adaptan mejor a nuestra visión artística y cómo combinarlos para desarrollar un estilo propio.
Conocimientos técnicos:
Trabajar con diversos materiales profundiza nuestra comprensión de aspectos fundamentales como la teoría del color, la composición, y la técnica del pincel. Esto nos va a permitir tomar decisiones más informadas en nuestras ilustraciones.
Oportunidades profesionales:
Ser competente en múltiples técnicas y materiales nos hacen más atractivos para una variedad de empleadores y clientes, ampliando nuestras posibilidades en el campo de la ilustración.
Enriquecimiento del proceso creativo:
Probar nuevos medios puede inspirarnos y llevarnos a explorar nuevas ideas, manteniendo nuestra práctica fresca e innovadora.
Espero que mi proceso te pueda ayudar y orientar con tu sueño. Con dedicación y un enfoque estratégico, podrás convertirte en un ilustrador exitoso y encontrar tu lugar en el mundo del arte y el diseño.
