¿Conoces las subvenciones que pueden ayudarte a impulsar tu negocio?

Emprender y poner en marcha un negocio no es nada fácil: cada vez supone más gastos, y, por si fuera poco, hoy en día nos enfrentamos a una competencia feroz en un mercado en constante cambio. Es por ello, que cada vez son más los emprendedores y empresas que buscan oportunidades de financiación que les permitan crecer o, al menos, sostenerse.

Entre las opciones más interesantes se encuentran las subvenciones, ayudas económicas no sujetas a reembolso, que pueden ser la pieza perfecta para poder llevar un proyecto al siguiente nivel.

¡De modo que este artículo puede interesarte! Sobre todo, si eres un emprendedor, una empresa de servicios, un fabricante o si gestionas un ecommerce. Quédate y toma nota, conocerás las ayudas más novedosas que pueden ayudarte a reflotar tu negocio.

¿Qué son las subvenciones y cómo funcionan?

Como íbamos diciendo, las subvenciones son ayudas económicas otorgadas por administraciones públicas con el objetivo de apoyar determinados proyectos o sectores estratégicos. A diferencia de un préstamo, cuando se concede una subvención no necesitas devolver el dinero (siempre que se cumplan ciertos requisitos) y suelen ser concedidas con la finalidad de impulsar aspectos como la innovación, el desarrollo empresarial, la sostenibilidad o la creación de empleo.

Es común que estas ayudas estén dirigidas a sectores concretos, como la tecnología, el turismo, la industria o el comercio, y cada una tiene sus propios criterios de elegibilidad, plazos de solicitud y condiciones para su otorgamiento. Por ello, es fundamental mantenerse al día con las convocatorias abiertas y contar con el asesoramiento adecuado para no dejar pasar oportunidades valiosas.

¿En qué se diferencia una subvención de una financiación? ¿Cuál es mejor?

La subvención y la financiación son dos formas diferentes de apoyo económico que se utilizan en diversos contextos, pero se diferencian en varios aspectos clave.

Para empezar, una subvención es una ayuda económica que se otorga sin necesidad de devolverla, como explicábamos al principio. Suelen destinarse a proyectos con un impacto social, cultural o ambiental, y están diseñadas para impulsar iniciativas que beneficien en general. Aunque no hay que reembolsarla, a menudo vienen acompañadas de condiciones, como la obligación de presentar informes o demostrar que el proyecto se ha realizado según lo planeado.

Por otro lado, la financiación implica un apoyo económico que generalmente toma la forma de préstamos o créditos. En este caso, sí que existe un compromiso de devolver el dinero, y además debe hacerse en un plazo determinado y con intereses. Eso sí, la financiación puede ofrecer más libertad en cuanto a su uso, ya que no siempre está vinculada a un proyecto concreto. Es común en el ámbito empresarial, donde se busca capital para iniciativas que generen ingresos a largo plazo.

Ahora, ¿Cuál es mejor? Pues depende de tus necesidades y objetivos.

Si buscas llevar a cabo un proyecto sin la carga de tener que devolver el dinero, una subvención podría ser la opción más adecuada para ti, aunque quizá tendrías que esperar más tiempo para conseguirla (según vayan saliendo) y además tendrás que cumplir con una serie de requisitos.  Sin embargo, si necesitas una cantidad mayor de dinero y estás dispuesto a asumir la responsabilidad de devolverlo, la financiación podría ser la elección más adecuada, sobre todo si se trata de un proyecto que tiene el potencial de generar beneficios en el futuro.

Al fin y al cabo, tú decides; mientras tengas tus objetivos claros, recuerda que tienes opciones para elegir ¡es lo mejor!

¿Cómo identificar la subvención adecuada para tu negocio?

De entre todas las subvenciones que hay, no debemos optar por cualquiera; en función del sector en el que trabajemos y el tipo de proyecto que desarrollemos, es posible que seamos elegible para una amplia variedad de subvenciones. Sin embargo, lo complejo es identificar cuál es la más adecuada para nuestro negocio.

¿Cómo podemos identificarla? ¿Tenemos que hacerlo todo nosotros solos? ¡Claro que no!

Lo interesante es contar con los servicios de asesores y plataformas que se encarguen de buscar y gestionar subvenciones para empresas y autónomos, como argumentan los profesionales de Ávalon Subvenciones, que ahora mismo están inmersos en las ayudas de kit digital para empresas. Este tipo de profesionales pueden llegar a facilitarte mucho la vida empresarial ¡merece mucho la pena!

De todas formas, también puedes hacer el trabajo de investigación tú mismo: para empezar, lo primero que debes hacer es analizar las necesidades de tu negocio. ¿Buscas digitalizar tu empresa? ¿Reducir gastos energéticos? ¿Te interesa expandirte internacionalmente?

Contestar estas preguntas podrá ayudarte a determinar con mayor exactitud la ayuda que necesitas para hacer crecer tu negocio. Además, es fundamental tener en cuenta los siguientes aspectos:

  1. Plazos de solicitud.

Las subvenciones suelen tener ventanas de tiempo limitadas para presentar la documentación, por lo que es recomendable estar atento a las fechas de convocatoria.

  1. Documentación requerida.

La solicitud de una subvención requiere la presentación de una serie de documentos y justificaciones que pueden variar según la ayuda que solicites; asegúrate de tener todo en orden antes de presentar la solicitud para no quedarte a las puertas.

  1. Cumplimiento de requisitos.

Cada subvención tiene requisitos específicos que debes cumplir. Debes revisar los requisitos mínimos de cada ayuda para evitar sorpresas.

  1. Justificación del uso de la subvención.

Una vez recibida la ayuda, muchas veces es necesario justificar en qué se ha gastado el dinero. Tenlo todo bien documentado, no tires tickets ni borres nada; esto puede ayudarte mucho en el futuro ¡créeme!

Subvenciones actuales que debes conocer.

Hoy en día existen muchas ayudas que puedes solicitar si tu empresa cumple los requisitos y si respetas el plazo de las mismas. Además, seguirán saliendo muchas más; por ello es importante permanecer atento a las noticias enfocadas a las empresas, y a las plataformas sociales que tratan estos temas. Hay periódicos online que se dedican solo a difundir información empresarial ¡así que te recomendamos seguirlos de cerca!

En la actualidad, podemos destacar las siguientes ayudas:

  • Ayudas para nuevos autónomos.

Esta subvención tiene como objetivo ayudar a las personas a iniciar su actividad como trabajadores autónomos, y pueden alcanzar hasta 5.000 euros por beneficiario. Son parte del Programa de emprendimiento, segunda oportunidad y estabilización económica de las empresas de trabajo autónomo, que prioriza a ciertos colectivos, como mujeres mayores de 35 años, hombres mayores de 30 años, jóvenes, y aquellos que inicien su actividad en pequeños municipios. Los importes cambian según el perfil, siendo 3.800 euros para algunos beneficiarios y hasta 5.000 euros en casos específicos.

Este programa está especialmente recomendado para personas que están comenzando en el mundo del emprendimiento, ya que proporciona un apoyo financiero inicial que puede ser decisivo para los nuevos emprendedores.

  • Programa de digitalización de Pymes.

Más conocido como “Kit digital”, esta subvención está enfocada en mejorar la infraestructura tecnológica y en ayudar a pequeñas empresas, autónomos y microempresas a adaptarse al mundo digital. También ofrece préstamos preferenciales (aquellos que los bancos conceden a sus mejores clientes).​

  • Fondo de transición justa.

Este programa, activo en comunidades como Castilla y León, se centra en ofrecer ayudas y subvenciones para el autoempleo y el desarrollo de proyectos empresariales en zonas que están transitando hacia economías más sostenibles​.

  • Ayudas a la contratación.

Son ayudas destinadas a apoyar la creación de empleo, facilitando la contratación de nuevos empleados, especialmente en pequeñas y medianas empresas. Este tipo de subvenciones también ayuda con la formación de los empleados​.

  • Subvenciones para la mejora de la salud y el bienestar laboral.

Estas ayudas buscan promover acciones que puedan abarcar desde la prevención de riesgos laborales, hasta la promoción de hábitos saludables y la mejora del entorno de trabajo.

Están destinadas a cubrir proyectos como:

  • La promoción de la salud física, mental y social de los empleados.
  • El desarrollo de medidas de conciliación laboral y familiar.
  • Iniciativas para la gestión del estrés, la prevención de adicciones, y la creación de entornos de trabajo más seguros y saludables.

Su finalidad es ayudar a las empresas a integrar programas de bienestar que aborden la salud integral de sus empleados y que se mantengan a largo plazo, con una visión positiva y preventiva. Estos proyectos, además de mejorar la calidad de vida laboral, también impactan positivamente en la productividad y la sostenibilidad empresarial.

¿Cómo podemos aumentar nuestras posibilidades para obtener una subvención?

Como comprenderás, conseguir una subvención no es tan sencillo como rellenar un formulario y esperar el dinero; deberás presentar un proyecto sólido, bien fundamentado y con un impacto claro.

A continuación, encontrarás algunos consejos que te ayudarán a aumentar tus posibilidades de éxito:

  1. Prepara un buen proyecto.

Cerciórate de que tu propuesta sea clara, detallada y ajustada a los requisitos de la subvención. Incluye toda la información necesaria, desde los objetivos hasta el presupuesto.

  1. Ten toda la documentación en regla.

Revisa y recopila toda la documentación requerida con antelación; ten en cuenta que cualquier error o falta de información podría suponer la denegación de la ayuda.

  1. Cumple con los plazos establecidos.

Por último, y dijimos antes, la mayoría de las subvenciones tienen plazos estrictos. Es muy importante estar atento a las fechas de convocatoria y asegurarte de enviar la solicitud dentro del tiempo establecido.

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